Ayer
Despierto bajo las nubes de la mañana, pensándote y de nuevo sin saber el por qué, desayunándome tus recuerdos, admirando tu silueta bajo la lluvia, en mis empolvadas madrugadas aún encuentro los pedazos de sueños que dejaste en mi almohada, esos sueños que ahora has dejado en el olvido, ahora que solo estoy sólo yo, mi locura, mis celos y mis sueños en un constante naufragio[...]
NARRATIVA
Mimeógrafo #01
Mayo 2013
Ayer
David Figueroa
Despierto bajo las nubes de la mañana, pensándote y de nuevo sin saber el por qué, desayunándome tus recuerdos, admirando tu silueta bajo la lluvia, en mis empolvadas madrugadas aún encuentro los pedazos de sueños que dejaste en mi almohada, esos sueños que ahora has dejado en el olvido, ahora que solo estoy sólo yo, mi locura, mis celos y mis sueños en un constante naufragio.
Tan distantes nuestros días de amantes, tan olvidados nuestro “Amor eterno”, tan amargo el sabor de lo que nos queda, tan profunda esta silenciosa vida de recuerdos.
Me he abandonado a las des-horas sin ti, pero no he dejado de creerte, escupiendo al olvido mis poemas dibujados por tu compañía, vagando bajo la eterna y silenciosa luz nocturna, mis penas se han vuelto parte de la noche, abrazando sombras de penumbras sólo consigo olvidar que necesito olvidarte, me cobijo en las esquinas sosteniendo un pedazo de mi orgullo, me desgasto entre lugares de hedores, entre calles desiertas, entre bosques desforestados, solo necesito recordar que necesito olvidarte.
No puedo quejarme pues yo puse mi corazón en tu mesa, mis deseos en tu piel y tu amor en el cesto de la basura.